- La reparación de fugas y la antigüedad de las tuberías contribuyen a que el agua potable arrastre sedimentos.
- Se han desinfectado 27.5 millones de metros cúbicos.
Para garantizar que el agua potable que se envía a los naucalpenses cumpla con los parámetros de calidad establecidos para el consumo humano, durante el año pasado se desinfectaron más de 27.5 millones de metros cúbicos del recurso hídrico; además de supervisar la esterilización en 49 pozos y darse mantenimiento preventivo a 431 equipos hipocloradores instalados en ellos.
Alejandro Vences Mejia, director general del OAPAS, explicó que la reparación de fugas, aunado a la antigüedad de las tuberías en zonas como Satélite y Lomas Verdes, provocan que sedimentos de las mismas sean arrastrados y revuelvan el agua que llega a algunos domicilios por un tiempo, después todo regresa a la normalidad.
Indicó que hasta la fecha se efectuaron mil 693 verificaciones de cloro residual libre y 461 exámenes microbiológicos de la red de distribución de agua potable en cada una de las colonias, beneficiando a 668 mil 395 personas.
El personal de OAPAS ha realizado 335 análisis bacteriológicos a las fuentes de abastecimiento (pozos y tanques), pipas y redes de distribución, así como muestras de hipoclorito de sodio para desinfectar microbiológicamente el agua potable que se distribuye en el municipio.
Un problema representativo de Naucalpan es la antigüedad de más de 50 años de su sistema de distribución del vital líquido, lo que ocasiona una pérdida del 40 por ciento del caudal suministrado debido a fugas en la red hidráulica y por la morosidad de algunos contribuyentes que ocasiona una falta de recursos para trabajos de mantenimiento.
Debido a las constantes reducciones tanto del Sistema Cutzamala como en la presa Madín, es necesario reusar el agua y respetar las tarifas impuestas, indispensables para el buen abastecimiento en todos los hogares naucalpenses.