La alcaldesa de Naucalpan, Angélica Moya Marín, anunció medidas emergentes para enfrentar, prevenir y sancionar el mal actuar de los policías, entre ellas destaca la creación de la Unidad Anticorrupción Policial -que investigará quejas y denuncias relacionadas con actos y omisiones de uniformados- y de un Observatorio Ciudadano de Seguridad, además de la depuración de elementos en la Subdirección de Tránsito Municipal.
En conferencia de prensa y acompañada del comisario Pablo Francisco Rosas Olmos, Moya Marín aseguró que son constantes las denuncias ciudadanas sobre corrupción y abusos de policías municipales, por lo que las acciones a implementar están enfocadas a fortalecer institucionalmente a la policía municipal, combatir la corrupción de los elementos policiales y fomentar una conducta honesta.
“Mi gobierno tiene el objetivo de resolver de raíz los problemas de inseguridad que durante años han afectado a quienes viven y transitan por Naucalpan. Sería ingenuo y omiso de nuestra parte no hacer caso a la realidad que vive nuestro municipio”, expuso la alcaldesa.
Señaló que a partir de hoy y de manera paulatina la estrategia integral de anticorrupción policial implementará cinco puntos: la instalación de la Unidad Anticorrupción Policial y el Observatorio Ciudadano de la Seguridad; la designación de Contralores Vecinales, desarrollo del Modelo Homologado de Justicia Cívica, incorporación de nuevas generaciones de policías y equipamiento de la corporación.
Detalló que inspirada en las mejores prácticas internacionales, la Unidad Anticorrupción Policial investigará quejas y denuncias ciudadanas relacionadas con actos y omisiones de elementos y mandos de la Dirección General de Seguridad Ciudadana y Tránsito Municipal.
Explicó que “en caso de hallar cualquier irregularidad, la unidad remitirá los casos a las autoridades competentes: Comisión de Honor y Justicia, en caso de faltas a la disciplina; Contraloría Municipal, por casos de responsabilidad administrativa; o al Ministerio Público, cuando alguno de los elementos cometa delitos”.
Esta unidad, agregó la alcaldesa, dependerá de la Presidencia Municipal y se verá fortalecida con investigaciones exhaustivas e independientes, análisis de riesgos de corrupción, sistema de alerta temprana, supervisión externa, así como transparencia y rendición de cuentas. Su titular será civil y tendrá el mismo rango que el director general de Seguridad Ciudadana y Tránsito Municipal.
Respecto al Observatorio Ciudadano de la Seguridad, Moya Marín expuso que su misión será observar las condiciones municipales en esta materia, haciendo énfasis en la vigilancia del desempeño de la corporación policial, y podrá realizar recomendaciones para mejorar las condiciones de seguridad, los procesos policiales y la política pública del gobierno municipal en este rubro.
“En un plazo de tres meses, el Ayuntamiento habrá de dictaminar y aprobar las reformas reglamentarias que estaré proponiendo en los próximos días para crear la Unidad Anticorrupción Policial y el Observatorio Ciudadano de la Seguridad de Naucalpan”, puntualizó.
Resaltó que esta acción se verá fortalecida con la creación de la figura de los Contralores Vecinales, quienes serán naucalpenses comprometidos que voluntariamente se inscriban en la convocatoria que será pública dentro de un mes aproximadamente.
Su función será vigilar la actuación de los policías y auxiliar a la autoridad municipal para identificar situaciones que puedan comprometer la seguridad, por lo que se centrarán en problemas, lugares, personas y tiempos específicos. Reportarán directamente a la Unidad Anticorrupción Policial y por su conducto a la Presidencia Municipal.
Moya Marín explicó que los Contralores Vecinales serán capacitados y evaluados para asegurar que desempeñen adecuadamente su función honoraria.
En cuanto al Modelo Homologado de Justicia Cívica, la presidenta municipal Angélica Moya resaltó que será actualizada la función de la Oficialía Conciliadora, a partir del modelo aprobado por el Consejo Nacional de Seguridad Pública, orientándola hacia la justicia restaurativa, “lo que permitirá reconstruir el tejido social y solucionar las problemáticas de la mano de nuestros vecinos”.
Como cuarto punto de las acciones emergentes, Moya Marín resaltó el equipamiento de la corporación, por lo que se inició el proceso de adquisición de las primeras 160 unidades, aunque se proyecta la disposición de 600 vehículos para completar la cobertura de patrullajes, operativos y labores de inteligencia preventiva en las 248 zonas que comprende Naucalpan.
“Quiero destacar que, dado al buen trabajo que hemos realizado desde el gobierno municipal para ordenar la casa, Naucalpan recibió un incremento en sus participaciones y todas las que entren por este concepto, serán destinadas a combatir la inseguridad”, agregó.
Por último, la alcaldesa se refirió a la quinta medida, la Academia de Policía, la cual desde el inicio de la administración se recibió sin registro ni certificaciones, “prácticamente cerrada e inoperante».
“Para hacer frente a esta omisión del gobierno municipal anterior, lanzaremos una convocatoria para el curso de formación policial para lograr el ingreso de cadetes que nos permitan dar paso a una nueva generación de policías municipales. De igual manera, diseñaremos un programa de retiro voluntario para que los elementos que han servido a los naucalpenses durante muchos años puedan separarse del servicio con dignidad” aseveró.
Tras reafirmar que su gobierno es de puertas abiertas y vinculado a los ciudadanos, Moya Marín invitó a los naucalpenses a participar con las autoridades para combatir la cultura de la ilegalidad y hacer de Naucalpan un municipio más seguro y en paz, con una mejor calidad de vida para sus habitantes.